LA MESA NAVIDEÑA

   

         


      En navidad, época de celebraciones especiales, nos gusta prepararlas con todo el esmero posible para que nuestra mesa luzca en todo su esplendor. Para ello, hacemos uso de las mejores galas, nuestra mejor mantelería, nuestra mejor vajilla... y todo ello adornado de la mejor manera posible. A todos nos gusta que quede bonita para agasajar a nuestros invitados y para ello hay una serie de normas establecidas para que todo quede de lujo. 


LA DISPOSICIÓN EN LA MESA

     A la hora de poner los servicios en la mesa, hay un protocolo establecido, por el que hay que regirse si queremos que todo quede impecable:

  • La disposición de los cubiertos. Éstos se ponen siempre según su orden de intervención. Si se van a usar dos tenedores o dos cuchillos , el que se va a usar en primer lugar será el que quede más retirado del plato. Y tened en cuenta que el cuchillo siempre se ha de colocar, aunque no se utilice. Su disposición será la siguiente: Los tenedores se colocan siempre a la izquierda del comensal  y con las púas hacia arriba; la cuchara y los cuchillos, a la derecha (los cuchillos siempre con el filo hacia dentro). La cuchara, siempre a la derecha del cuchillo. Los cubiertos del postre, horizontales a los comensales, entre los platos y las copas, y dependiendo de éste, se pondrá cuchara y tenedor, o cuchillo y tenedor.
  • La disposición de los platos. Según la tradición, el orden correcto de colocación de los platos en la mesa es: abajo, el plato de presentación, que se usará para el último plato; encima el plato intermedio, por lo general el plato llano; y sobre éste, el plato sopero o la taza de consomé. Todo dependerá del menú que tengamos planteado presentar.
  • Disposición de las copas. La copa de agua siempre va centrada a la vertical de los platos con relación a los comensales. Las copas de vino se sitúan a la derecha de la copa de agua, siguiendo también el orden de intervención: así la primera a la derecha será siempre para el primer vino que sirvamos. También se puede poner la copa de cava, en este caso la situaremos a la izquierda de la copa de agua y las de vino, siempre a la derecha.
               La copa más grande es la dedicada al agua, y también la del
       vino tinto es más grande que la del vino blanco. Para el cava,             copas alargadas.



MANTELERÍA

     La elección de la mantelería irá en consonancia con la de la vajilla; es decir, si la vajilla va a tener muchos motivos decorativos, la mantelería a elegir, será todo lo simple que se pueda en color, generalmente en un sólo tono. Por el contrario, si la vajilla es lisa o con poco adorno, podemos optar por una mantelería estampada. Siempre debe destacar una de las dos.
     Dependiendo de estos detalles, también podemos jugar con una cristalería en color. Pero cuidado con no mezclar mucho colorido en la mesa, pues de esto ya se encargan los centros que pongamos en ella; a mi gusto, en estos días opto por una cristalería transparente, ya que permite ver el contenido de la copa, pero ya dependerá del gusto de cada uno, porque la verdad que hay cristalerías en color preciosas. Del mismo modo, también podemos mezclar color y transparentes.

     Por favor, el mantel debe estar planchado sin las señales de estar guardado, y sacarlo antes de su cajón para comprobar que esté en perfecto estado por su hubiese que lavarlo.



ACCESORIOS DE MESA
  •  Uno de ellos es el plato para el pan que siempre se situará a la izquierda del tenedor, incluso si no se tienen intención de servir pan. En mesa redonda, siempre en la parte superior de los cubiertos. En mesa rectangular, ligeramente más a la izquierda. Si optáis por poner un cuchillo para que se lo partan, que sea encima del platito de éste y a la derecha del pan.
  •  Puestos de mesa. Esto es una opción personal, pero si hay muchos invitados no está demás indicar el sitio en el que hay que sentarse, para no estar titubeando a la hora de hacerlo. 
  • Salero y pimentero. Lo ideal es que todos se pasen estas cosas unos a otros, por lo que no es necesario poner uno en cada puesto, pero sí sería lo ideal poner varios distribuidos en la mesa.


SERVILLETAS

      Su puesta en la mesa tiene dos opciones:  al lado del tenedor, sobre la mesa, o sobre el plato. Y su presentación se puede hacer de varias maneras: en forma de sobre, de abanico, clásica....  ; si la presentamos en pico, con éste mirando hacia el comensal. Ya dependerá del gusto del anfitrión. Eso sí, deberá armonizar con la mantelería.
     Si por motivo de degustación, ésta se mancha mucho, lo cortés es retirarla tras el plato en cuestión y ofrecer una nueva.



PRESENTAR LA SOPERA

     Para evitar que ésta resbale, ponerle sobre el plato de soporte una servilleta doblada en cuatro, con los extremos levantados; y siempre que sea igual a la de la mantelería.



PRESENTACIÓN DEL AGUA

     Siempre en jarras de cristal.



PRESENTACIÓN DEL VINO
  • Blancos, rosados y cavas. Pueden servirse en una cubitera con agua e hielo para mantenerlos frescos. Utilizar una servilleta para secar las botellas al servir.    
  • Vinos de reserva. Pueden servirse en una cesta para este menester, que impide que se remuevan los posos de la botella.
  • Hay que tener en cuenta que no todos los vinos sirven para todos los platos. Los tintos combinan con caza, quesos, carnes rojas,  asadas, estofadas... Los rosados con pescados azules, pastas huevos, arroces o carnes blancas. Y los blancos, con pescados, mariscos, huevos , quesos frescos, arroces sopas...


CENTROS DE MESA

     Hay dos cosas fundamentales a tener en cuenta: la primera, que nunca deben ser altos, para poder ver al comensal que tenemos en frente. Y segundo y fundamental, evitad los centros de flores demasiados olorosos, pues pueden enmascarar los olores de la comida. 
     Del mismo modo, hay quién pone velas. No a todos les gusta el olor que desprenden, además que pueden presentar el mismo problema que las flores aromáticas, así que aquí va la intuición del anfitrión.


MODO DE SERVIR

     A la hora de servir o de colocar la bandeja para que se sirvan, hay que tener presente que se sirve por la izquierda del comensal. El vino, por el contrario, se sirve por la derecha.
     Al servir el vino, la botella no debe apoyarse nunca en la copa y no sujetarse por el cuello. Y cuando terminemos de servirlo, limpiar siempre la boca con una servilleta que se usará para este menester.



MODO DE RETIRAR LOS PLATOS

    A tener en cuenta: los platos han de retirarse cuando la última persona haya terminado de comer, y siempre que hayan pasado unos minutos prudenciales. Y por el lado derecho.


Comentarios