HELADOS Y SORBETES

 


     ¿Quién no ha hecho alguna vez un helado en casa y el resultado no es el que nos esperábamos? Pues para conseguir el efecto deseado, sólo hay que seguir unos sencillos consejos.


UTENSILIOS

     Para lograr un buen helado, no hace falta un gasto desorbitado. Con estos tres utensilios tendremos lo suficiente:

  • Una batidora eléctrica de varillas para mezclar los ingredientes de la receta y deshacer los cristales de hielo que se forman durante la congelación. Y como no todos tenemos una eléctrica, con una manual nos apañaremos bien.
  • Un molde o cubitera de metal o plástico fino, ya que estos materiales son buenos conductores del frío.
  • Un colador de malla fina para tamizar las cremas y eliminar los grumos que puedan tener.
     Pero lo que sí es imprescindible es un congelador de 3 ó 4 estrellas para que el proceso de endurecimiento sea más rápido.


PASOS A SEGUIR

  • Enfriar el molde o cubitera vacía antes de empezar.
  • Preparar la mezcla, tamizarla y dejarla enfriar muy bien antes de introducirla en el congelador.
  • Ponerla en el molde o cubitera e introducirla en el congelador. Dejar que ésta se vaya solidificando.
  • Una vez solidificado, retirarlo del congelador y batirlo enérgicamente con las varillas y volver a introducir en el congelador. Dejar solidificar otra vez (es conveniente repetir un par de veces más este procedimiento, para así evitar la formación de cristales de hielo)

CONSEJOS
  • Es bueno humedecer los moldes o las cubiteras con agua y mantenerlos en el congelador durante unos quince minutos antes de rellenarlos con la mezcla. De este modo se consigue acelerar el proceso de congelación.
  • Al rellenar las cubiteras o  los moldes, hay que prever que la preparación no sobrepase sus 2/3 partes de capacidad, para evitar que se desborden durante el proceso de la congelación.
  • Los helados de frutas deben prepararse con éstas ya maduras, ya que si no lo están, puede ocurrir que su excesiva acidez malogre el sabor de la preparación.
  • Si el helado no se congela fácilmente, es señal de que el congelador está demasiado sobrecargado o el regulador está en un punto demasiado bajo.
  • Si por el contrario, se endurece demasiado rápido, es porque el congelador genera un frío excesivo que puede formar grumos en la mezcla.
  • Se puede reemplazar la leche fresca por leche en polvo sin ningún inconveniente. No afectará en el resultado.
  • Si queremos preparar un helado moldeado, es preciso forrar el fondo del molde con papel impermeable, después del último procedimiento de batido y apretar la crema con el revés de una cuchara para que ésta pueda adoptar bien la forma del molde.
  • Para desmoldar los helados, es preciso sacarlos del congelador con alguna anticipación y sumergir el molde durante unos segundos en un cuenco con agua caliente.

BUENO ES SABER
      Los helados pueden clasificarse en tres grandes grupos según el tipo de ingredientes que integran su composición:
  • Cremosos: ricos en materias grasas aportadas por la nata, las yemas de huevo y la leche, que le dan una consistencia muy suave.
  • Frutales: a base de frutas y almíbar, aromatizados con esencias y licores, y a los que se les añade gelatina o almidones para evitar la formación de cristales de hielo que desmerecen su textura homogénea y compacta.
  • Sorbetes: tienen una consistencia más suelta que la de los helados frutales y una apariencia cristalina muy particular, aportada por la mezcla de almíbar con frutas o licores y claras de huevo. 

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