MOLDES

 

         Para que las preparaciones no se peguen a los moldes de cocina, hay varias soluciones prácticas que nos ayudarán como forrarlos de papel de aluminio, papel sulfurizado o untarlos con grasa, ya sea aceite o mantequilla. 

     Si utilizamos aceite, lo podemos extender con la ayuda de un pincel, con la yema de los dedos o utilizar el aceite que ya se vende es spray. Si la opción es la mantequilla, también se puede utilizar el pincel o la yema de los dedos y, eso sí, hay que dejarla fuera del frigorífico para que esté un poco blanda.

     Una vez engrasado el molde, se puede espolvorear con almendras  o galletas picadas en las preparaciones dulces, o harina, queso o pan rallado en las preparaciones saladas. Y para conseguir un buen rebozado del molde, introducir una cucharada del ingredientes elegido, moverlo de manera que se reparta uniformemente en su interior y voltearlo para eliminar el sobrante.

     Cuando utilicemos el papel de aluminio, hay que forrarlo bien antes de untarlo. teniendo en cuenta que las arrugas puede quedar marcadas según la consistencia de la preparación. Tened la precaución de dejar que los bordes sobresalgan para que en el momento de desmoldar, éstos nos sirvan de ayuda para levantarla y separarla con cuidado. Y recordad que, para conseguir una mejor difusión del calor, la preparación ha de estar en contacto con la parte más brillante del papel de aluminio.