INGREDIENTES:
500 gr de patatas
75 gr de sal gorda
Para el mojo:
1 diente de ajo
1 cucharada rasa de pimentón dulce
1 guindilla seca
1/2 rebanada de pan de molde
5 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de vinagre
1 pizca de comino
Sal
PREPARACIÓN:
- Lavar muy bien las patatas y, sin pelarlas, disponerlas en una olla.
- Cubrirlas con abundante agua y añadir la sal gorda.
- Cocer unos 20 minutos, o hasta que estén tiernas.
- Escurrirlas y colocarlas en una cazuela sin líquido alguno.
- Cocinarlas unos minutos, con movimientos circulares, para quitarles la humedad y que se sequen del todo. Reservar.
- Eliminar la corteza del pan de molde, desmenuzarlo y remojarlo con el aceite de oliva y el vinagre.
- Pelar el ajo, retirarle el germen y machacarlo e un mortero con una pizca de sal, el comino, el pimentón y la guindilla.
- Cuando esté todo bien majado, añadir el pan con el aceite y el vinagre.
- Mezclar bien y agregar el agua necesaria para obtener una textura homogénea.
RECOMENDACIONES:
- La olla ha de ser lo suficientemente grande como para que las patatas se cuezan sin estar amontonadas unas sobre otras.
- Comprobar el punto de cocción de las patatas, pinchándolas con una aguja. Deben notarse tiernas pero enteras.
- Intentad que las patatas tengan un tamaño parecido.
BUENO ES SABER:
- La sal debe ser gorda para que las patatas no la absorban o quedarían muy saladas. Con esta sal, cogerán sólo la que necesitan.
- A la acción de cocer las patatas sin líquido se llama "hacer saltar las papas". Poco a poco las patatas se van arrugando y van adquiriendo un color blanquecino debido a la sal.
¡QUE APROVECHE!
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